Los diamantes cultivados en laboratorio de alta calidad son tan baratos que la industria se enfrenta a problemas de exceso de oferta y fraude.
El precio de los diamantes naturales ha caído alrededor de un 30% en la última década, informó el Financial Times, mientras que sus equivalentes cultivados en laboratorio han bajado un 90%.
Algunos productores han quebrado porque el bajo coste los deja sin rentabilidad, y la diferencia de precio en comparación con los diamantes naturales (que son de calidad indistinguible) significa que el fraude está muy extendido: una empresa india de diamantes fue acusada de sustituir gemas naturales por valor de 60.000 dólares en sus joyas por piedras cultivadas en laboratorio.
Los diamantes artificiales también se utilizan en el blanqueo de dinero, vendiéndose a precios de diamantes naturales para ocultar flujos de dinero ilícitos.
Traducido de SEMAFOR