La nueva iniciativa busca promover una comunidad universitaria inclusiva y equitativa mediante proyectos de paz y bienestar, con la participación de más de 50 estudiantes.
El 21 de agosto de 2024, la Universidad de Caldas inauguró el Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia en el Centro Cultural Universitario Rogelio Salmona. Este proyecto, impulsado por la Oficina de Bienestar Universitario y la Comisión Dinamizadora para la Formulación de la Política de Paz y Convivencia Institucional, busca transformar la convivencia en el campus universitario y fortalecer el compromiso con la paz y la equidad.
Durante el evento de lanzamiento, el rector Fabio Hernando Arias Orozco subrayó la importancia del centro al destacar que su objetivo es mejorar la convivencia y apoyar el bienestar de la comunidad universitaria. “Doy una calurosa bienvenida a los más de 50 practicantes que estarán desarrollando proyectos dirigidos a la paz y al bienestar de nuestra Universidad. Su energía y creatividad son esenciales para nuestro avance. Con el respaldo de docentes y unidades académicas, transformaremos estos retos en oportunidades de crecimiento”, comentó Arias Orozco.
El Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia se centra en reconocer las diversas realidades de los estudiantes, docentes y administrativos, quienes enfrentan desafíos adicionales a sus responsabilidades académicas y laborales. Según el Coordinador de la Política de Paz y Convivencia, Enrique Jaramillo, el centro es parte de un proceso más amplio que involucra a la comunidad universitaria en la formulación de una política de paz. “Más de 270 miembros de nuestra comunidad han participado en la construcción de un diagnóstico sobre conflictos y mediaciones para alcanzar la paz”, explicó Jaramillo.
Alexander Álvarez, jefe de Bienestar Universitario, destacó que la Universidad ha superado los 9.000 millones de pesos en presupuesto para bienestar, enfocándose en salud mental y apoyo económico. Sin embargo, reconoció los desafíos persistentes como la alta incidencia de ansiedad y estrés entre los estudiantes, lo que refuerza la necesidad de nuevas políticas y prácticas.
Detalles de fondo: La creación del Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia representa un esfuerzo significativo por parte de la Universidad de Caldas para promover un ambiente académico inclusivo y libre de conflictos. La iniciativa se alinea con un compromiso más amplio de la institución para abordar problemas estructurales y ofrecer un entorno de apoyo integral para su comunidad.
Claudia Patricia Leguizamón, docente del Departamento de Artes Escénicas, y Jessica Castaño, Coordinadora de la Maestría en Justicia Social y Construcción de Paz, también participaron en el evento. Leidy Vivián García, estudiante de Trabajo Social y Artes Plásticas, expresó su entusiasmo por el impacto positivo del nuevo centro en la vida universitaria.
El lanzamiento del Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia marca un paso importante en el camino hacia una comunidad universitaria más unida y equitativa. La Universidad de Caldas reafirma su compromiso con la paz y el bienestar de sus miembros, preparando el terreno para un futuro más armonioso y colaborativo.
Información adicional:
Para más información sobre el Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia y los proyectos asociados, visite el sitio web oficial de la Universidad de Caldas.
Con la creación del Centro de Prácticas para la Paz, U de Caldas sigue el camino a la sana convivencia en los campus
Este miércoles 21 de agosto, el Centro Cultural Universitario Rogelio Salmona fue el escenario del Seminario Carnaval y el lanzamiento del Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia, una iniciativa liderada por la Oficina de Bienestar Universitario de la Universidad de Caldas y la Comisión Dinamizadora para la Formulación de la Política de Paz y Convivencia Institucional. Este evento abre un camino valioso hacia la construcción de una comunidad universitaria más inclusiva, equitativa y consciente de su papel en la transformación social.
El rector de la universidad, Fabio Hernando Arias Orozco, destacó la importancia de estas iniciativas, que no solo buscan mejorar la convivencia en los campus, sino el fortalecimiento del compromiso institucional con la paz y la equidad. “Doy una calurosa bienvenida a los más de 50 practicantes que estarán desarrollando proyectos dirigidos a la paz y al bienestar de nuestra Universidad. Jóvenes que con su energía y creatividad son el motor que necesitamos para avanzar. Ellos contarán con todo nuestro apoyo porque creemos firmemente que trabajando juntos, con el respaldo de nuestros docentes y las unidades académicas, podemos convertir estos retos en oportunidades de crecimiento y cambio positivo. Estamos tejiendo bienestar en comunidad”, expresó.
El Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia tiene, como uno de sus objetivos principales, el reconocimiento de las realidades que enfrentan muchos estudiantes, docentes y administrativos, quienes, además de sus estudios, deben trabajar y cuidar de sus familias. Esta y otras realidades deben llevar a la Universidad a replantear sus currículos y desarrollar estrategias que eviten la deserción, abordando los problemas desde una perspectiva estructural y no individualizada.
El lanzamiento del centro de prácticas es solo el inicio de un proceso más amplio, que incluye la formulación participativa de una política viva de paz y convivencia. “Este proceso, que ya ha involucrado a más de 270 miembros de la comunidad universitaria, construyó un diagnóstico de los conflictos y las mediaciones posibles para alcanzar la paz dentro de la institución”, dijo el Coordinador de la Política de Paz y Convivencia, Enrique Jaramillo.
En su intervención, el jefe de Bienestar Universitario, Alexander Álvarez, subrayó el reto de construir una educación pública accesible, equitativa y libre de discriminaciones y violencias. “Con una inversión sin precedentes para nuestro bienestar universitario, la U. de Caldas ha superado los 9.000 millones de pesos en presupuesto, destinando recursos significativos para la salud mental y el apoyo económico a su comunidad educativa. Sin embargo, se han identificado desafíos importantes, como los altos niveles de ansiedad, depresión y estrés entre los estudiantes, lo que refuerza la necesidad de estas nuevas políticas y prácticas para la paz”, enfatizó.
El Seminario Carnaval y el lanzamiento del Centro de Prácticas para la Paz y la Convivencia representan un paso firme hacia la consolidación de una universidad comprometida con la vida, la felicidad y la equidad. La Universidad, con su comunidad unida, está decidida a tejer un futuro de paz desde la educación y la convivencia.
