El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, llegó a Pekín para conversar con altos funcionarios chinos.
Es poco probable que las dos potencias resuelvan sus diversas disputas, desde el apoyo implícito de China a la guerra de Rusia en Ucrania hasta la frustración de Pekín por las restricciones estadounidenses a su acceso a la tecnología de semiconductores de vanguardia.
Pero los analistas dicen que la visita de Sullivan podría al menos allanar el camino para conversaciones directas entre el presidente estadounidense Joe Biden y el líder chino Xi Jinping en una cumbre de Asia Pacífico la semana después de las elecciones estadounidenses de noviembre, aunque el momento de esa reunión plantea dudas sobre si la vicepresidenta Kamala Harris asistiría si ganara la presidencia.
Traducido de SEMAFOR