Sistemas de vigilancia con inteligencia artificial, aviones de combate y 55.000 policías y soldados están desplegados antes de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos en París esta semana.
El vasto aparato de seguridad tiene como objetivo cumplir la promesa de los organizadores de que la capital francesa será «el lugar más seguro del mundo» durante los Juegos, a pesar de una serie de recientes ataques con cuchillos junto con las preocupaciones de que los eventos se distribuyan por toda la ciudad en lugar de en un único parque olímpico de fácil seguridad.
La violencia en el territorio francés de Nueva Caledonia obligó a las autoridades a redistribuir el equipo de seguridad en el Pacífico Sur, por lo que Francia ha tomado prestadas grandes cantidades de armamento -incluidos vehículos blindados camuflados que han llamado la atención en el centro de París- de Qatar, informó Le Monde.
Traducido de SEMAFOR
