El dominio de Indonesia en la cadena mundial de suministro de níquel se produce a expensas de la seguridad de los trabajadores.
El país del sudeste asiático tiene las mayores reservas de níquel del mundo y, gracias a la enorme inversión china, es el mayor productor de este metal, un componente vital de los productos tecnológicos y de energía verde.
Pero los accidentes mortales en la industria indonesia son habituales: un trabajador murió el mes pasado y las instalaciones registraron 101 muertes entre 2015 y 2024, más de la mitad de ellas en IMIP, que es la mayor planta de procesamiento de níquel del planeta.
Una explosión en otra planta el año pasado mató a 21 trabajadores. “Primero la producción, después la seguridad”, dijo un trabajador al Financial Times. Estados Unidos consideró recientemente que el níquel indonesio se produce con trabajo forzado.
Traducido de SEMAFOR