Estados Unidos ha puesto fin a la imposición de nuevas restricciones al acceso de China a los chips de alta gama.
Las restricciones son el último paso de una campaña de dos años para controlar los avances tecnológicos chinos. Washington dice que las medidas se deben a razones de seguridad nacional, mientras que Pekín sostiene que Estados Unidos está tratando de mantener a raya a su rival.
La mayoría de los analistas creen que las restricciones han tenido un éxito irregular: han restringido el acceso de China al hardware de vanguardia necesario para desarrollar los sistemas de inteligencia artificial más potentes a corto plazo, pero han incentivado al país a trabajar para desarrollar un sector de semiconductores propio.
La administración Biden también ha «dejado lagunas que se explotan de forma rutinaria«, señaló el boletín SemiAnalysis en un análisis profundo de las formas en que el gigante tecnológico chino Huawei ha evadido las restricciones.
Traducido de SEMAFOR