El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, se enfrenta a un juicio político tras declarar y derogar rápidamente la ley marcial.
El anuncio nocturno de Yoon decía que la decisión apuntaba a “fuerzas antiestatales” vinculadas a Corea del Norte, pero que en realidad estaba motivada “por sus propios problemas políticos desesperados”, informó la BBC. Los legisladores se apresuraron a acudir al Parlamento para votar en contra de la medida y Yoon levantó la orden.
El caos hizo caer los mercados, aunque hubo cierta recuperación después del cambio de actitud de Yoon. El presidente es profundamente impopular y enfrenta escándalos de corrupción e investigaciones: su decisión sugiere “ya sea una extralimitación desesperada o graves impulsos antidemocráticos”, escribió un académico para el Carnegie Endowment for International Peace. Los parlamentarios votarán pronto sobre si enjuiciar a Yoon, y tal vez a su ministro de Defensa junto con él.
Traducido de SEMAFOR