China impuso aranceles al aceite de colza en represalia a los impuestos que la propia Ottawa impuso a los vehículos eléctricos chinos.
La semana pasada, Canadá anunció aranceles del 100% a los vehículos eléctricos, así como del 25% al acero y al aluminio, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos y la Unión Europea.
Pekín acusó a Canadá de “dumping” de petróleo barato y denunció “medidas restrictivas unilaterales discriminatorias” sobre sus productos.
La cosecha de colza de Canadá es enorme (el nombre norteamericano del cultivo, “canola”, es una contracción de “Canadá” y “petróleo”) y China representa la mitad de sus exportaciones: el ministro de Agricultura de Canadá calificó la decisión de “profundamente preocupante”.
Traducido de SEMAFOR