Los esfuerzos para regenerar el tejido cardíaco están cobrando impulso, lo que aumenta la posibilidad de revertir, en lugar de solo ralentizar, las enfermedades cardíacas crónicas.
Algunos animales pueden regenerar el músculo cardíaco dañado, pero los humanos mueren con la mayoría de las células cardíacas con las que nacieron. En los ataques cardíacos, las células musculares mueren y no se reemplazan.
Pero un fármaco experimental puede estimular a las células a multiplicarse y reemplazar a las muertas, reconstruyendo el tejido perdido. Hasta ahora solo se ha probado en animales, pero los ensayos en humanos están programados para 2026.
Si el fármaco es eficaz en personas con enfermedades cardíacas, algún día podría probarse en personas mayores sanas, para ver si puede “convertir un corazón de 70 años en un corazón de 40 años“, dijo un científico a The Wall Street Journal.
Traducido de SEMAFOR