Las nuevas empresas estadounidenses de inteligencia artificial con fundadores chinos están reubicando a sus ingenieros en China.
Las empresas de tecnología estadounidenses que enfrentan un mayor escrutinio por parte de los legisladores por sus vínculos con China están buscando combatir la percepción de que “el gobierno chino podría influir en sus productos o infiltrarse en sus clientes”, informó The Information.
En los últimos años, la inversión de capital de riesgo chino ha sido una fuente clave de financiación para los empresarios nacidos en China, pero las tensiones geopolíticas ahora también están impulsando a algunas empresas emergentes como HeyGen a distanciarse de esos primeros inversores, incluso sacándolos de sus directorios.
Los cambios van más allá de las pequeñas empresas emergentes: Microsoft pidió recientemente a cientos de sus empleados con sede en China que consideraran reubicarse a medida que se intensifica la batalla global por los mejores talentos en inteligencia artificial.
Traducido de SEMAFOR