Los medicamentos para bajar de peso están cambiando la cultura del gimnasio.
El auge de los medicamentos GLP-1, que reducen los antojos de comida y permiten perder peso fácilmente, han enriquecido a compañías farmacéuticas como Novo Nordisk, pero también tienen impactos en otras partes de la economía.
Para los gimnasios y clubes de salud, que aún se están recuperando de la pandemia, esos impactos serán “enormes pero complicados“, informó el Financial Times: Las máquinas de cardio, como las cintas de correr y las bicicletas estáticas, ya estaban perdiendo popularidad a medida que la gente recurría a los equipos de entrenamiento de fuerza.
Los medicamentos para bajar de peso “exacerbarán la presión”, ya que los usuarios dejarán de hacer ejercicio para controlar el peso, pero los estudios sugieren que los medicamentos pueden causar pérdida de masa muscular además de grasa, lo que significa que la gente tendrá cada vez más necesidad de las mancuernas.
Traducido de SEMAFOR
