Shanghái presume de tener más cafés que cualquier otra ciudad del mundo.
La ciudad portuaria se considera desde hace tiempo internacional y cosmopolita, y su cultura del consumo de café se ha desarrollado a lo largo de los años.
Pero el fenómeno pospandémico de la socialización al aire libre ha impulsado el número de cafés a más de 8.000, según las autoridades.
La mayoría de ellos son locales boutique independientes en lugar de las grandes cadenas que dominan otras ciudades chinas, informó la BBC.
Sin embargo, el entusiasmo impulsado por los jóvenes se ve amenazado por el aumento de los costes (los precios de los granos de café han subido mucho) y los elevados gastos generales; muchas tiendas ahora se convierten en bares de música en vivo por la noche.
Traducido de SEMAFOR