Cuatro voluntarios que vivieron dentro de un hábitat simulado de Marte dirigido por la NASA durante más de un año emergieron ayer.
La misión “Crew Health and Performance Exploration Analog” comenzó hace 378 días: los astronautas (¿o terranautas?) vivieron todo ese tiempo en una cúpula impresa en 3D de 1.700 pies cuadrados llamada Mars Dune Alpha, viendo cómo la gente se las arreglaría con la vida en el planeta rojo.
La misión les permitió experimentar el aislamiento y la claustrofobia de la realidad, pero no la gravedad reducida, los niveles de radiación aumentados o el viaje de nueve meses para llegar allí en una lata glorificada.
No obstante, la NASA espera que la prueba proporcione información valiosa para futuras misiones reales a Marte, previstas para fines de la década de 2030 o principios de la de 2040.
Traducido de SEMAFOR