En un hito sin precedentes, la investigación liderada por el director científico de Innvestiga, Carlos Andrés Díaz, desarrollada como parte de su doctorado en Ingeniería Química en la Universidad Nacional de Colombia sede Manizales, ha alcanzado un logro significativo al obtener la patente por invención, otorgada por la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) por un período de 20 años. Este innovador proyecto, que inició en 2015, presenta una alternativa revolucionaria a la degradación de drogas y ha evolucionado para convertirse en un referente internacional.
SOLUCIÓN AMIGABLE CON EL MEDIO AMBIENTE
La investigación, que ha logrado que un conjunto de microorganismos consuma la cocaína como fuente de energía, propone una solución ambientalmente amigable en comparación con los métodos tradicionales de incineración. Este enfoque, liderado por el doctor Díaz junto al doctor Juan Carlos Higuita y la directora general del CDT, Elisabeth Restrepo Parra, ha contado con el respaldo del Centro Internacional de Estudios Estratégicos contra el Narcotráfico (CIENA) adscrito a la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional de Colombia.
En un hito sin precedentes, la investigación liderada por el director científico de Innvestiga, Carlos Andrés Díaz, desarrollada como parte de su doctorado en Ingeniería Química en la Universidad Nacional de Colombia sede Manizales, ha alcanzado un logro significativo al obtener la patente por invención, otorgada por la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) por un período de 20 años. Este
innovador proyecto, que inició en 2015, presenta una alternativa revolucionaria a la degradación de drogas y ha evolucionado para convertirse en un referente internacional.
La investigación, que ha logrado que un conjunto de microorganismos consuma la cocaína como fuente de energía, propone una solución ambientalmente amigable en comparación con los métodos tradicionales de incineración. Este enfoque, liderado por el doctor Díaz junto al doctor Juan Carlos Higuita y la directora general del CDT, Elisabeth Restrepo Parra, ha contado con el respaldo del Centro Internacional de Estudios Estratégicos contra el Narcotráfico (CIENA) adscrito a la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional de Colombia.
En el proceso de degradación, los microorganismos, obtenidos del suelo de plantaciones reales de cultivos ilícitos en Tumaco (Nariño), consumen la droga y la convierten en una molécula inofensiva para el medio ambiente. Este método, que tarda entre 18 y 24 horas en degradar la sustancia en un impresionante 99,7%, se presenta como una alternativa viable y sostenible frente a la incineración que se
lleva a cabo actualmente.
El doctor Díaz subraya que la investigación no manipuló la genética de los microorganismos; en cambio, estos evolucionaron naturalmente hasta desarrollar la capacidad de consumir la droga de manera efectiva. Este enfoque innovador ha despertado el interés tanto a nivel nacional como internacional.
Repercusiones a Nivel Nacional e Internacional
La obtención de la patente marca un hito importante para Innvestiga como parte de la Universidad Nacional de Colombia sede Manizales, destacando la relevancia y excelencia de sus laboratorios en el ámbito científico. Además, el proyecto se ha presentado en foros mundiales donde agencias internacionales, incluyendo Naciones Unidas y destacadas universidades como Harvard, han expresado interés en esta investigación única.
El logro de esta patente no solo posiciona a Colombia a la vanguardia de la investigación científica, sino que también tiene implicaciones económicas y ambientales significativas. La incineración de sustancias ilícitas, un método convencional en la actualidad, genera consecuencias ambientales negativas debido a la emisión de contaminantes. Este proyecto ofrece una alternativa que no solo preserva el medio ambiente, sino que también plantea oportunidades económicas a través de la transformación sostenible de las drogas incautadas.
Con la patente en mano y el reconocimiento internacional, el equipo de investigadores liderados por el doctor Díaz busca recursos para escalar el proceso. Este escalado, estimado en alrededor de un millón de dólares, permitiría evaluar las variables clave en una fase piloto y, eventualmente, explorar alternativas para la disposición de la droga a gran escala.
Este proyecto, único en Colombia y sin precedentes a nivel mundial, marca un paso significativo hacia un futuro donde la investigación científica y la innovación se unen para abordar desafíos complejos y contribuir a un mundo más sostenible.