Los herederos multimillonarios de la cadena japonesa de tiendas de conveniencia 7-Eleven podrían recibir una gran suma de dinero si aceptan una adquisición extranjera.
Alimentation Couche-Tard, el propietario canadiense de la marca rival Circle K, hizo el lunes una oferta «amistosa y no vinculante» de 38.000 millones de dólares para comprar 7-Eleven, una oferta que la valoró en una quinta parte más que su precio previo a la oferta en el mercado de valores japonés, informó la BBC.
Pero el rico clan japonés Ito puede no querer desprenderse de su legado familiar, dijo un analista a Bloomberg, y la oferta puede enfrentar oposición en Japón dada la importancia institucional de la compañía en el país.
Una fusión, que crearía una de las cadenas minoristas más grandes de Estados Unidos, probablemente también la sometería al escrutinio antimonopolio de Estados Unidos, informó el Financial Times.
Traducido de SEMAFOR