Instagram hará que las cuentas de los adolescentes sean privadas de forma predeterminada y les mostrará menos contenido para adultos, en una revisión radical de cómo los menores usan la aplicación.
Los cambios, que afectarán a más de 100 millones de menores de 18 años en todo el mundo, se producen en un momento en que la empresa matriz Meta busca contrarrestar una ola de demandas que alegan que sus plataformas mantienen adictos a los jóvenes mientras les brindan contenido dañino.
Un cambio clave que muestra a los padres qué temas están viendo sus hijos adolescentes y a qué cuentas se están enviando mensajes ha generado preocupaciones de que podría amenazar la privacidad de los usuarios vulnerables.
“Creemos que hemos encontrado un equilibrio decente [entre seguridad y privacidad]”, dijo el director de Instagram, Adam Mosseri, a The New York Times. “Pero estoy seguro de que vamos a recibir un montón de comentarios”.
Traducido de SEMAFOR
