Los israelíes organizaron protestas masivas contra el primer ministro Benjamin Netanyahu el domingo después de que se recuperaran los cuerpos de seis rehenes en Gaza, incluido un ciudadano israelí-estadounidense con doble nacionalidad.
Un importante sindicato también convocó una huelga general el lunes.
Muchos culparon a Netanyahu por el estancamiento de las negociaciones sobre el alto el fuego y la devolución de los rehenes, pero ni él ni Hamás parecen tener prisa por llegar a un acuerdo de ese tipo, escribió CNN.
Netanyahu cree que un acuerdo podría deshacer su gobierno, mientras que Hamás considera que permitir que la tensión se desborde y se convierta en una guerra regional es un resultado potencialmente favorable.
Sin embargo, también es posible que acordar un alto el fuego ahora pueda verse como una victoria para Netanyahu, argumentó Foreign Affairs, y cualquier aumento posterior de aprobación puede ayudarlo
a sobrevivir a la reelección incluso si su gobierno actual se fractura.
Traducido de SEMAFOR
