Un manizaleño, voluntario de la Cruz Roja, fue clave en la emergencia; fue líder del equipo de intervención e ingresó a la montaña más alta de Colombia, haciendo uso de sus 15 años de experiencia.
La articulación entre entidades ha fortalecido las capacidades de respuesta de las emergencias y desastres
La Unidad de Gestión del Riesgo de Manizales (UGR), como entidad coordinadora del Sistema Municipal de Gestión de Riesgo de Desastres (GRD) trabaja en el fortalecimiento de las capacidades de respuesta frente a emergencias y desastres, y una de sus principales estrategias está relacionada con la articulación entre entidades, encontrándose con personas con vocación y entrega, que se han destacado por su formación.
Es así como la capital de Caldas, a través de la Cruz Roja seccional Caldas, una de las entidades del Sistema Municipal de GRD de Manizales, aportó al rescate de dos guías de montaña, que el pasado 13 de marzo se accidentaron en el Pico Colón, sobre la Sierra Nevada de Santa Marta, a Germán Jiménez, un experto en el rescate de montañas y voluntario que lleva 25 años salvando vidas.
El rescatista desde hace 15 años integra el equipo de salvamento de búsqueda y rescate, lidera el proceso de especialización de Salvamento, Búsqueda y Rescate, que se hace de rescate de montaña en Colombia; también es guía profesional en áreas de montaña, combinación de habilidades que le permitieron ingresar a la montaña más alta de Colombia como líder del equipo de intervención, a través de una operación compleja por el difícil acceso, donde caminó dos días para cumplir el objetivo.
“Fue una operación difícil porque fueron dos días caminando, con emociones encontradas, ya que estuvimos con resguardos que llevaban más de 15 años sin ver personas diferentes a los nativos, por lo que se debió negociar el acceso por el tema de las energías y su cultura; era un área con acumulación de grandes rocas y desprendimiento constante que hizo todo más difícil. La operación se hizo en cuatro etapas: primero, sacarlos en camilla hasta una zona estable; la segunda, caminando por el estado de salud, luego en mulas hasta otro punto y finalmente, cargados con indígenas locales. Ellos fueron grandes aportantes”, aseguró Jiménez.
La operación fue coordinada por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo; la Cruz Roja Colombiana, desde la seccional Boyacá – Caldas con sede central en Bogotá, asumió la parte de operaciones; la Policía Nacional se hizo cargo de la y logística; la emergencia también tuvo el aporte de los indígenas, las familias y montañistas.
Estas capacidades de respuesta están en el municipio de Manizales para la protección de la comunidad y es papel de la UGR afianzar los procesos de articulación entre las entidades para fortalecer aún más las capacidades de respuesta de las emergencias y desastres que se puedan presentar.
