
Es hora de ser optimistas sobre el futuro de los coches autónomos, argumentó un tecnólogo.
Azeem Azhar, del grupo de investigación Exponential View, era escéptico sobre el impacto a corto plazo de los coches robot: escribió en 2022 que la conducción autónoma estaba en una «trayectoria decepcionante».
Pero dos años después, la tecnología parece estar en una curva ascendente, con el coste de un Waymo en San Francisco ahora competitivo con un Uber.
«La historia está plagada de tecnologías que entusiasmaron a los primeros usuarios pero no triunfaron», admitió Azhar en IEEE Spectrum, pero los robotaxis están «empezando a salir de la burbuja tecnológica«.
No todo es un progreso fácil para la conducción autónoma: GM está desconectando su filial de robotaxi, y en su lugar está girando hacia los vehículos sin conductor de propiedad privada.
Traducido de SEMAFOR