En Corea del Sur se iniciaron las negociaciones globales para poner fin a la contaminación por plástico, aunque los delegados dudaron de que se llegue a un acuerdo.
Las conversaciones se produjeron poco después de la cumbre COP29 en la que los líderes mundiales acordaron recaudar al menos 300.000 millones de dólares al año para 2035 para ayudar a las naciones en desarrollo a adaptarse al cambio climático, una cifra criticada por los países más pobres como insuficiente .
Las últimas negociaciones tienen sus propios desacuerdos, informó AFP, centrados en cuestiones como si se debe limitar la producción de plástico, si se deben prohibir los productos químicos vinculados a su producción y cómo pagar cualquier acuerdo final.
Si bien muchas naciones africanas, asiáticas y europeas quieren un acuerdo ambicioso, se dice que se oponen a ellos los productores de petróleo cuya producción conduce a la creación de plástico.
Traducido de SEMAFOR