
Un ciclón causó devastación en el territorio francés de Mayotte, en el océano Índico, dejando un gran número de muertos y destruyendo infraestructuras y viviendas.
Las autoridades estimaron el número de muertos en varios cientos (Le Monde describió escenas apocalípticas), pero advirtieron que llegar a una cifra precisa sería difícil porque aproximadamente un tercio de la población de la isla está compuesta por personas que viven al margen después de huir de las cercanas Comoras, y la tradición musulmana local de tratar de enterrar a los muertos en 24 horas agregaría más complejidad a la tarea.
Los científicos han atribuido la intensidad de tormentas como la que azotó Mayotte en parte al cambio climático, ya que el aumento de las temperaturas aumenta el riesgo de condiciones meteorológicas más extremas.
Traducido de SEMAFOR