
Australia está probando nuevas tecnologías destinadas a aumentar el rendimiento de los cultivos y el ganado y reducir el impacto ambiental de la agricultura.
Hongos experimentales que atrapan nutrientes en el suelo, aplicaciones de seguimiento de emisiones y fertilizantes automatizados son algunas de las innovaciones que se están probando: Australia tiene subsidios agrícolas relativamente bajos y está «en la primera línea del cambio climático«, informó el Financial Times, por lo que los agricultores allí están particularmente interesados en «innovar y agilizar».
El aislamiento geográfico del país, el entorno regulatorio relativamente progresista y, según los estándares occidentales, las altas tasas de adopción de tecnología han impulsado a Australia a actuar como un banco de pruebas para la tecnología ahora cotidiana, incluidos los pagos con chip y PIN y sin contacto.
Traducido de SEMAFOR