¿Es cierto que sin las corridas de toros en la Feria de Manizales el Hospital Infantil se acaba? El funcionamiento del Hospital Infantil no depende de esos recursos. Confunden a la ciudadanía.
La reciente aprobación de la ley que prohíbe las corridas de toros en Colombia ha generado un intenso debate que ha dividido a la sociedad entre aquellos que defienden la tradición taurina y aquellos que abogan por el respeto y la protección de los derechos de los animales.
Durante décadas, las corridas de toros han sido una parte arraigada de la cultura colombiana, especialmente en ciudades como Manizales, donde la tauromaquia ha sido considerada una expresión de identidad y patrimonio cultural. Sin embargo, para muchos activistas y defensores de los derechos de los animales, estas prácticas representan un acto de crueldad injustificable que debe ser erradicado en una sociedad que busca avanzar hacia estándares éticos más elevados.
Los defensores de las corridas de toros argumentan que esta tradición tiene profundas raíces culturales y económicas, generando empleo y atrayendo turismo a las regiones donde se llevan a cabo. Además, señalan que se trata de un espectáculo que celebra la valentía y la destreza del ser humano frente a un animal poderoso, y que existen regulaciones y prácticas para minimizar el sufrimiento del toro durante el evento.
Por otro lado, los activistas antitaurinos sostienen que ninguna tradición cultural puede justificar el maltrato animal. Argumentan que las corridas de toros son una forma de entretenimiento cruel y obsoleta, en la que el sufrimiento y la muerte del toro son el centro del espectáculo. Además, destacan que existen alternativas culturales y económicas que pueden sustituir estas prácticas sin sacrificar la identidad local ni el sustento de las comunidades.
En el contexto actual de avance ético y conciencia ambiental, la prohibición de las corridas de toros en Colombia refleja una creciente sensibilidad hacia el sufrimiento animal y un reconocimiento de que las tradiciones deben evolucionar para adaptarse a los valores contemporáneos. Si bien es cierto que la tauromaquia ha sido parte de la historia colombiana, también es verdad que la sociedad está llamada a cuestionar y reevaluar prácticas que causan sufrimiento innecesario a los animales.
En última instancia, la aprobación de esta ley marca un paso importante hacia una convivencia más justa y respetuosa entre humanos y animales. En un mundo donde el progreso se define cada vez más por el respeto y la compasión hacia todas las formas de vida, las corridas de toros se perfilan como una práctica incompatible con los valores de una sociedad moderna y ética. Es hora de dejar atrás las tradiciones que causan sufrimiento y avanzar hacia un futuro en el que la dignidad y el bienestar de todos los seres vivos sean prioritarios.
Se prohibirán las corridas de toros en Colombia
En un hecho sin precedentes y luego de múltiples intentos, la Cámara de Representantes aprobó en último debate el proyecto que prohibirá las corridas de toros en Colombia.
Bogotá, mayo 28 de 2024 (Prensa Cámara) En un hecho sin precedentes, y luego de intensos debates, la plenaria de la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley que busca prohibir las corridas de toros en Colombia con 93 votos por el Sí y 2 votos por el No. El proyecto ahora pasará a conciliación y sanción presidencial.
El representante liberal Juan Carlos Losada, quien ha impulsado esta iniciativa e reiteradas ocasiones, señaló que Colombia le da ejemplo al mundo hoy. «Aquí hay un país que dice que ninguna tortura se regula, se prohíbe (…) nos volvemos una sociedad menos violenta y más civilizada, hoy damos un salto cuántico en el respeto por la vida», agregó y destacó el trabajo de la congresista Esmeralda Hernández en el Senado de la República.
A su turno en el representante ponente de Alianza Verde, Alejandro García Ríos, agradeció el esfuerzo de los animalistas durante varios años, pues este proyecto ha sido archivado 14 veces. “Sin ustedes esto no habría sido posible, sabíamos que no sería fácil pero hoy estamos cerca a la sanción presidencial», reflexionó.
Uno de los puntos más resaltados por quienes se opusieron al proyecto es que la prohibición podría impactar a las familias de quienes viven del toreo. Por esta razón, iniciando el debate, el representante Christian Garcés, del Centro Democrático, presentó una proposición que fue negada, que buscaba crear una comisión encargada de buscar alternativas en la regulación. «No se puede simplemente prohibir porque aquí se generan empleos», advirtió. Esta posición la compartió la representante Ana Rogelia Monsalve, quien señaló que «hoy la celebración no va a ser para muchos colombianos que no tendrán forma de sustento», dijo.
Ante estas observaciones el representante García insistió en que el proyecto contempla una “reconversión” para las personas que demuestren que viven de las corridas de toros, se trata de una transición económica en donde se les incluirá en las actividades que se realizarían en los centros culturales que se crearían en las antiguas plazas de toros.
“A los taurinos les decimos que participen de la reconversión, hay oportunidades en este proyecto. A Manizales y Cali, esto es una oportunidad para que estas ciudades y estos espacios subutilizados puedan ser lugares de cultura, arte, deporte y conciertos. Al país le decimos que se prioriza el bienestar animal y al mundo que Colombia está en un proceso de transformación cultural con dignidad por todos los seres vivos”, aseveró el representante García Ríos.
Fuente: Oficina de Información y Prensa de la Cámara de Representantes
¿Es cierto que sin las corridas de toros en la Feria de Manizales el Hospital Infantil se acaba?
Cormanizales aporta o dona una plata al Hospital Infantil. Esa donación en realidad se da porque el Concejo de Manizales exonera de pago de impuestos a las corridas y ellos se ahorran entre 400 y 500 millones de pesos. Eso es un ahorro por exoneración del Concejo y lo entregan por donación. Pero además esa donación que en promedio por año donaron entre 25 y 30 millones. Antes del 2018 donaban un poco más de 300 millones, eso ni siquiera correspondía al ahorro. El funcionamiento del Hospital Infantil no depende de esos recursos. Confunden a la ciudadanía.
Tomado de: ElTiempo.com MATEO GARCÍA – REDACCIÓN POLÍTICA