Los precios mundiales del arroz cayeron más que nunca en 16 años después de que India —el mayor productor del mundo— levantara algunas restricciones a la exportación, aliviando los temores de que empeorara la inseguridad alimentaria mundial.
La decisión fue impulsada por cosechas mejores de lo esperado y animó a los exportadores de Myanmar, Pakistán, Tailandia y Vietnam a recortar los precios para competir con la enorme oferta adicional.
Los precios de los alimentos han comenzado a caer desde sus picos tras la invasión rusa de Ucrania en 2022: el índice de precios de los alimentos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura es aproximadamente un 25% más bajo que en marzo de ese año.
Pero el cambio climático está impulsando fluctuaciones a largo plazo, señaló recientemente la Organización Mundial de la Salud, y Bloomberg informó esta semana que otros cultivos se están volviendo más caros.
Traducido de SEMAFOR