Estados Unidos construirá un nuevo cuartel general en Japón, según declaró el secretario de Defensa estadounidense, en un esfuerzo por disuadir lo que describió como una agresión china.
Pete Hegseth, en su primera gira asiática, calificó a Tokio de «socio indispensable», palabras tranquilizadoras para un gobierno japonés preocupado por la retirada de Estados Unidos bajo la agenda de «Estados Unidos primero» del presidente Donald Trump.
La postura más firme de Washington hacia Pekín —recientemente decidió cortar el acceso de China a la tecnología estadounidense y endureció su postura sobre Taiwán— también está generando un optimismo cauteloso en Taipéi, según informó The Wall Street Journal.
China está intensificando las amenazas a la isla, pero sus funcionarios están «cada vez más seguros de contar con el respaldo de Trump«.
Traducido de SEMAFOR
